La industria de la construcción ha mostrado una notable resistencia al cambio y, aunque se han desarrollado nuevos productos y materiales, los procesos constructivos siguen siendo prácticamente los mismos desde sus inicios.  La emergencia climática ha puesto al sector bajo escrutinio. Como responsable del 36% de las emisiones vinculadas al uso de las energías y del 40% del consumo total de la energía, el sector de la construcción enfrenta la presión de adaptarse a las normativas europeas y los compromisos globales en materia de sostenibilidad. Grupo Construcía detectó este problema hace más de 10 años y, desde entonces, se comprometió a transformar el paradigma de la construcción basándose en los principios de la economía circular, especialmente en el enfoque Cradle to Cradle®.  La economía circular promueve la gestión de materiales en ciclos de uso infinitos, un proceso que requiere una gestión eficiente de grandes cantidades de datos y, para ello, la digitalización es indispensable. Una de las claves de la economía circular es la colaboración. Para el proceso de digitalización de la construcción, Grupo Construcía se apoya en partners como Bravent la consultora tecnológica especializada en soluciones innovadoras como Inteligencia Artificial y que apuesta por la digitalización del Grupo. El papel de la digitalización en la construcción