La accesibilidad universal en la vivienda se refiere a la capacidad de cualquier persona, independientemente de su edad, capacidad física o discapacidad, para utilizar una vivienda de manera segura y sin obstáculos. Aunque la accesibilidad universal en la vivienda es un derecho humano fundamental, todavía son muchos los hogares que no están diseñados pensados en la accesibilidad.

¿Sabías que en España solo el 2 % de las zonas comunes de acceso a las viviendas son accesibles? Una cifra alarmante que demuestra que todavía queda mucho por hacer en esta materia. En este artículo, profundizaremos en los aspectos clave de este problema y analizaremos posibles soluciones. ¡No te lo pierdas!

¿Cómo deben ser las viviendas accesibles?

Las viviendas accesibles deben tener en cuenta las necesidades de todas las personas, independientemente de su edad o capacidad, y deben diseñarse de manera que se eliminen las barreras arquitectónicas y se proporcione el espacio, la iluminación y la tecnología adecuada para facilitar la vida independiente, cómoda y segura de todos los habitantes de la vivienda.

¿Por qué es importante la accesibilidad en las viviendas?

La accesibilidad en las viviendas es importante para las personas con discapacidad física, que pueden necesitar espacios más amplios, puertas más anchas y baños adaptados para poder vivir en su hogar de una forma confortable y segura. Para las personas mayores, que pueden tener problemas de equilibrio y movilidad, también resulta vital.

Una vivienda accesible puede mejorar la calidad de vida de las personas que la habitan o visitan. Un hogar sin barreras arquitectónicas puede hacer que las tareas diarias sean más fáciles de realizar, lo que puede reducir el estrés y la fatiga. Además, la accesibilidad en la vivienda puede fomentar la inclusión social y el bienestar emocional de las personas con discapacidad al permitirles participar plenamente de la vida comunitaria, teniendo acceso a todos los servicios y actividades.

Es importante, también, tener en cuenta que la accesibilidad universal no se limita únicamente a las personas con discapacidad, sino que también afecta al resto de personas. En diferentes momentos de nuestra vida, todos podemos encontrarnos con dificultades para desplazarnos, manipular objetos o tener una buena audición o visión, como en la niñez, durante el embarazo o cuando sufrimos lesiones temporales que limitan nuestra movilidad. Además, actividades cotidianas como desplazarnos con un carrito de bebé o hacer la compra pueden resultar complicadas. Por todo ello, es fundamental que las viviendas estén diseñadas y equipadas para garantizar la accesibilidad y la comodidad en todas las etapas de nuestra vida.

¿Cómo mejorar la accesibilidad en las viviendas?

Desafortunadamente, todavía hay muchos hogares que no están diseñados ni construidos pensando en la accesibilidad. A menudo, esto se debe a la falta de conocimiento o la falta de requisitos de accesibilidad en los códigos de construcción locales.

Existen muchas maneras de mejorar la accesibilidad en las viviendas, incluyendo la eliminación de barreras arquitectónicas, el uso de colores y contrastes para mejorar la visibilidad, el diseño de cocinas y baños adaptados o el uso de tecnología.

Para conseguirlo, es importante la concienciación y que los arquitectos y constructores tengan en cuenta todos los requisitos de accesibilidad universal desde el principio del proceso de diseño y construcción.